Barry
—William, si quieres trabajar en la empresa deberías de firmar un contrato y no pasártela en mi oficina quitándome tiempo y espacio, así te damos tu lugar—sugiero mientras borro unas cosas en el ordenador.
—No quiero estar sujeto a un horario fijo, pero bueno, pon a que me redacten mi contrato.
—Gracias por aceptar, tendrás un horario flexible, te lo prometo. Pero por favor, sé lo más responsable que puedas, hay cosas muy importantes que debes de empezar a resolver.—Suspiro irritado.—Empieza por la demanda de la señor que fue despedido el mes pasado.
—Como tú digas, ese hombre no te sacará ni un centavo.
—Eso no importa, no me niego a dar un monto, solamente quiero darle lo justo y lo que le corresponde por lo que trabajó.
—Exactamente, ¿qué fue lo que hizo?
—Era chófer, se llevó la camioneta y la destrozó en un accidente, quiere que le paguemos los gastos del hospital y eso no puede ser, él debería que pagar por lo que hizo bajo el influjo del alcohol. —miro los mensajes que Kelly me ha enviado.
*Saldré con Liz a ver a mis padres, llegaré en la noche. Te quiero." No saben cuanto me emociona que me diga un "te quiero " de nuevo, es como tocar la gloria con loa dedos.
—¿Por qué sonríes?—pregunta William.
—Por nada—estoy feliz.
—Que rápido se ha recuperado Rease, pensé que tardaría más de 4 meses.
—Lo sé y eso es muy bueno. Además, Kelly ya tiene 8 meses, ¿puedes creerlo? —suspiro de la emoción.
—Ya me lo dijiste ayer, hermano. Me rehusó a la idea de tu esposa, ¿como es que tus bebés solamente tienen accesorios y ropa blanca?¿ Ven la importancia de saber sus sexos?
—Mi esposa está loca, en la ecografía de 12 semanas estaba segura que quería saberlo pero los bebés no se dejaron ver, así que en la tercera ecografía ella dijo que no quería saber, así que ya no sé que es lo que quiere esa mujer.
—¿Hormonas? es la única explicación que veo viable.
—Creo que sí lo es, pero gracias a esas hormonas Kelly parece un terrón de azúcar, es tan dulce conmigo que me empalaga, nuestra relación está cambiando mucho, y creo que estamos perdidamente enamorados...
—Deja de hablar así, sinceramente estás perdido.
—No más que tú, miserable.
—Yo no estoy así, ella y yo tenemos una relación abierta, muy pero muy funcional. Y estamos muy a gusto. Luz es muy buena—hace un ademán obsceno.
—Das asco, recuerda que ya no se puede hablar así de las mujeres, está en nuestro código, es por respeto, a mis futuras hijas, si es que lo son, si son niños... Les enseñaremos lo que es bueno—me río.copy right hot novel pub