Lién había salido de un largo y relajante baño. Mientras revolvía su cabello húmedo con la toalla, reviso por centésima vez su celular para ver si tenia algun mensaje o llamada perdida de Dominic pero éste no daba señales de vida. Sabía que estaba haciendo terapia, y que tenía mas trabajo que de costumbre, pero no entendía porque no salia aunque fuera un minuto de su rutina para llamarla al menos.

Tres meses habían pasado desde que Lien se había ido y Dominic, se sentía cada vez más solo. Estaba desesperado por volver a verla pero debía respetar el tratamiento que el psicólogo le había recomendado.

Penso Dom en las palabras del Psicólogo, mientras se relajaba unos minutos en su oficina.

Ya no era el mismo, notablemente había cambiado. Y por el bien de Lien y su propia felicidad, debía lograr superar aquel episodio en el que perdiera a su esposa. Ya no tenía retratos de Johana a la vista. Ya no sufría insomnio, por ende tampoco fumaba. Cuando pensaba en Lien, solo pensaba en ella y no en su esposa. Johana era solo un recuerdo que ya no lo atormentaba. Tal y como debía haber sido desde un principio.

Recordó cuando el psicólogo diagnosticó su trastorno, y al instante sonrió , como si no pudiera creer lo difícil que había sido luchar contra su recuerdo y haber sobrevivido tantos años.

-Lo siento tanto Lien... Espero que puedas perdonarme el haberme alejado de esta manera.- Murmuró para sí mismo.

El timbre retumbó en la casa de Lien.copy right hot novel pub