Capítulo 558
El Range Rover blanco se acercó, y tras despedirse de Silvia con un gesto de la mano, ella entró de nuevo al hospital. Rafael se inclinó para abrocharle el cinturón de seguridad y, al levantar la vista, notó que la mirada de ella estaba distante y perdida. Cubrió su mano con la suya, cerrándola con firmeza.
Cuando sintió su calor, Violeta, al recobrar la conciencia, se encontró perdida en la profunda mirada tranquila de Rafael y Murmuró, “Rafael, ¿soy una mala persona…?”
En realidad, ya había considerado que Lamberto podría proponer el divorcio.
Francisco Alonso, su padre adoptivo, ya se había divorciado y su padre biológico, a quien había conocido
recientemente, también enfrentaba la misma situación a mitad de su vida. Violeta sabía que todo esto estaba muy
relacionado con ella.
Recordando la imagen de un Lamberto desmejorado, como si hubiese envejecido años de golpe, Violeta se sentía triste y culpable.
“¡No!” Rafael frunció el ceño y le pellizcó la mejilla con la otra mano. “No has hecho nada malo. Piensa en tu madre, solo estás buscando justicia para ella. Además, incluso si tuvieras un corazón de serpiente, seguirías siendo mi Vivi.”
La voz calmada de Rafael aliviaba la culpa en el corazón de Violeta.
Tenía razón, su madre lo había pasado aún peor.
Forzada a romper con su amante y forzada a dejar a su hija para tomar un camino sin retorno. Violeta no acusó a Melisa de algo infundado, simplemente reveló la verdad de aquellos días, buscando justicia para su madre.
Al oír las últimas palabras, Violeta lo miró de reojo con una mueca de desaprobación, aunque en su interior se sentía dulcemente complacida.
Al verla finalmente sonreír, Rafael arrancó de nuevo el motor.
El Range Rover avanzaba lentamente al alejarse. Violeta miró hacia el espejo del retrovisor y vio a una madre e hija saliendo del edificio de hospitalización. Melisa era sostenida firmemente por Bianca, casi todo su peso recaía sobre su hija.
Cuando bajaba el último escalón, Melisa tropezó y cayó débilmente al suelo.
Violeta podía ver que Melisa amaba profundamente a su esposo, pero la idea de hacer cualquier cosa para obtener ese amor, incluso quitarlo de las manos de otra persona, era despreciable para Violeta. El divorcio propuesto por Lamberto era sin duda el golpe más devastador para ella.copy right hot novel pub