¡Qué arrogancia!

Él, Ismael Briol, era solo un yerno inútil de la familia Villarroel. ¿Quién le dio el derecho para echar bravatas? ¡Tan ridículo!

Lola Quesada estaba displicente.

¡Se había decidido a hacer que Ismael lo pagase todo y a echar de la empresa a Helena Villarroel, esa puta!

A Issac Villarroel le pertenecería la empresa.

Lola no permitiría que esa mujer humilde se apropiase del puesto de vicepresidente de Issac.

En ese momento, Elisenda Cazalla se quedaba al lado de Helena. Miró a Ismael con los ojos llenados de admiración como una niña pequeña.

¡Qué valiente!

¡Sus palabras y sus comportamientos mostraron al máximo la fuerza de novio!

Pensaba que fue un inútil que no supo hacer nada. ¡Podía ser tan fuerte para proteger a Helena!

Sin embargo, resultó imprudente porque pegó a Lola, que era la hija de la familia Quesada de la Ciudad H y su hermano mayor era el famoso, ¡Ian Quesada!

Aquel hombre obedecía dócilmente de Gustavo, que le elogiaba mucho.

¿Quién era Gustavo?

¡El Gustavo Morillo de la Ciudad H!

¡El líder de los cuatro poderosos del Inframundo!

Una existencia que toda la Ciudad H temblaría por una sola frase suya.

¿Qué se pudo hacer?

Elisenda estaba ansiosa pensando sin cesar porque se preocupaba mucho por Helena.

E incluso estaba dispuesta a llamar a la policía.

Al mismo tiempo, Ismael sacó el móvil y mandó un mensaje.

Varios colegas estaban discutiendo incesantemente en la oficina.

-¡Madre mía! Ismael es valentón que se atrevió a pegar a Lola. Ella es inversionista. ¡Va a estar jodido! -

-Ese inútil, que realmente se toma como un hombre verdadero. Ian, su hermano, está a las órdenes de Gustavo. ¿Quién osará provocar problemas? -

-Exacto. Se ofreció a hacer todo eso. Veremos cómo lo arreglará, pero a la directora Helena le dará la infelicidad. -

Esos que siempre estaban con ideas tardías se fijaban en los movimientos de Ismael enfadadamente.

Ese mocoso que se atrevió a provocar peleas les causó mucha molestia.

Si pidiese una explicación el presidente, serían castigados.

Issac acudió apresurándose después de un corto pensamiento. Fingió ser enojado, pero preguntó con preocupación - Lolita, ¿qué te ha pasado? Solo me fui un rato antes. ¿Cómo puede ser así? -

Al ver que acudió Issac, Lola se transformó en una niña pequeña. Hizo el mohín y señaló a Ismael gritando - Issac. Mira. Me pegó ese inútil. ¡Le darás una buena lección a él!

Issac se pudo enfurecido de repente, y bramó de cólera señalándolo - ¡Ismael Briol, hijo de puta! Lola es la inversionista de nuestra empresa. ¿Cómo te ocurrió que la pegaste aquí? ¡Insolente! ¡Qué insolente eres! ¡Mando ahora que le pidas perdón a Lola! -

En aquel entonces, Lola también se mostró muy agresiva, diciendo -No. No sirve para nada la disculpa. ¡No dejaré que se escape! Se atrevió a pegarme. ¡Insisto que mi hermano le rompiese la mano! -

Por otra parte, Ismael movió la cabeza indiferentemente. Esa simple mujer no sabría nada de lo que sucedería.

¿La familia Quesada?

Bueno.

Cualquier persona que yo, Ismael Briol, quiero castigar no tendrá tiempo para respirar.

Ya que me veo obligado, no se quejen que yo sea cruel.

Al notar que Ismael todavía osó mover la cabeza, Issac se enojó otra vez pegando el grito en el cielo -¡Joder! Ismael. ¿Qué actitud y expresión tienes? ¿Cómo? ¿Acaso quieres pegarme incluso? -

¡Puta que le parió!

Todavía no lo había castigado desde que lo pegó a Issac, y esa vez pareció hecha adrede para ir en su busca.

Podría resolver de una vez los problemas de Ismael y Helena.

Por lo que había sucedido Helena ni pensó dos veces el puesto de vicepresidente.copy right hot novel pub