Su cuerpo se movía al ritmo de la música, sus audífonos sonaban a todo volumen en sus oídos y su cuerpo la seguía. Aquella forma era la mejor para salir del bucle de estrés al que estaba amarrada.
Aquél teléfono lo tenía por regalo de sus padres, era con lo único a lo que tenía familiaridad del mundo humano. Hacia unos cuantos años lo había recibido y junto a su hermano Jake aprendió a usarlo. Tenía solo música en el.
Luego de que tuvo aquella pequeña disputa con Xel había vuelto al territorio de la manada con Gray detrás, quiso pedirle ayuda pero si ella no lo logró mucho menos él.
“Tú eres más que ella Gea, eres la única persona que me vio” Aquellas palabras habían salido de la boca de Xel, sí, se escuchaba raro que él dijera esas cosas siendo alma de Risse pero, ¿Acaso era su culpa su manera de pensar? Ambos tenían planes, se irían juntos y de alguna forma Gea hacia interferencia.
Ella había conocido a Xel en una situación muy extraña, ellos sí tenían un vínculo. Ella le salvó la vida. Clarisse no lo sabía y ninguno de los dos tenían planes de decirle, Gea lo conoció primero y le habló de él a ella.
Cuando ambos se vieron por primera vez supieron que eran el uno para el otro o a menos eso era él para ella porque Xel podía encontrar otra alma fácilmente.
Su cuerpo se detuvo abruptamente y respiró pesado, estaba enojada con ella, demasiado. No podía arrastrar a su hermano ni tampoco podía arrastrar a Xel pero al parecer ambos tenían la misma respuesta para ella: No eres quien para darme ordenes.
—Odio esta vida —Soltó enojada y al instante su padre entró a la habitación, esta quitó los audífonos de sus oídos y asintió en su dirección para que le hablase.
—¿Te irás en serio, hum...? —Preguntó su padre, le estresaba algunas veces el desinterés que ellos tenían algunas veces respecto a ella. Sí, era adoptiva pero, ¿Y qué?
—Sí papá, sabes que sí —Dijo esta agria tomando asiento, vio a su alrededor visualizando las maletas en una esquina.
—Ya que te vas debo contarte algo, pero no puedes decirle a nadie —Esta asintió sin ganas y su padre caminó hasta ella sentándose a su lado —Es un secreto entre padre e hija, ¿Sí? —Esta asintió al instante su padre tomó sus manos entre las suyas.
—¿Qué sucede papá? —Pregunta esta suspirando pesado.
—Es sobre el alfa Eros —Esta negó de inmediato poniéndose de pie —Me escucharás Gea. Él se postulará para Rey pero lo que no sabe es que debe tener mate para eso —Al terminar de decir aquellas palabras se carcajeó.
—¿Y qué te da risa papá? ¿Qué yo soy su mate y me iré? ¿Qué él no ha tenido la oportunidad de conocerme? —Preguntó incrédula y con tono enojado. Un nudo se había formado en su garganta. Su padre borró la sonrisa al instante.
—No Gea, me da risa la vergüenza qué pasará frente a todos. Él es tan ególatra, me da pena que tú eres su mate, pena por él porque nunca lo sabrá —La sorpresa en el rostro de ella fue evidente.
—¿Cómo puedes decir una cosa tan atroz papá? —Preguntó esta con incredulidad— Eres tan crudo, no conocía esa faceta tuya. Tú tienes a mamá y son felices juntos, ¿No quieres eso para tu alfa?
—Él puede tener todo eso pero no contigo —Pero, pero ¿De que hablaba ese hombre? Su egoísmo estaba haciendo que su hija se enojase aún más.copy right hot novel pub