Vanesa llamó entonces a Adam, pero nadie respondió a la llamada.
Había algo fuera de lugar.
No pudo seguir viendo la televisión, sino que se levantó y marcó el número de Stefano.
Stefano dio una respuesta rápida y su voz era igual que antes, dudando en decir algo.
Vanesa se apresuró a preguntarle si le pasaba algo, y le dijo que no podía contactar con Santiago.
Al otro lado del teléfono, Stefano dijo:
—Está bien, quiero verlo porque necesito hablar con él sobre lo de Nico. Hay algo malo con Nico.
Vanesa sabía que Santiago hacía trabajar a Nico para él.
Ahora algo le pasaba a Nico, luego es decir, algo le pasaba a Santiago.
Al pensar en esto, Vanesa se sintió inquieta:
—¿Qué le pasa a Nico?
Stefano suspiró:
—Nico está en el hospital y está muy malherido. Parece que fue atacado.
Vanesa no habló durante un largo rato, y entonces se dio cuenta de que Nico debía ser descubierto cuando investigara algo para Santiago.
El accidente de Nico afectaría en primer lugar a Santiago.
Pensando así, de repente empezó a preocuparse.
Se apresuró a decirle a Stefano:
—Stefano, ayúdame a encontrar a Santiago, me temo que se encontró con algo.
Stefano tranquilizó a Vanesa:
—No te preocupes. Santiago no es tan débil y hay varios guardaespaldas a su alrededor.
Aunque dijo eso, le dijo a Vanesa que primero pediría a su subordinaros que fueran a la empresa de Santiago y luego al usura de los Merazo para encontrar a Santiago.
Y luego dijo a Vanesa:
—Te informaré si tiene ninguna noticias, no te preocupes.
Vanesa también recordó que pasaron por el usura cuando volvían en coche, además, Santiago fue a preguntar algo.
Así que, Santiago quizás se había ido con prisa ahora mismo para volver a comprobarlo.
Pensando así, le dijo a Stefano que pasaron por el usura y que Santiago quizás fue al usura de nuevo.
Stefano se quedó en silencio durante unos segundos y luego dijo que sabía qué hacer a continuación.
No hablaron mucho por teléfono.
Después de colgar, Vanesa se quedó en el salón junto a la puerta.
No podía quedarse quieta. Durante un rato se quedó allí, preocupada, mientras entraba la señora Diana.
Vanesa la vio y caminó hacia ella, saludando.copy right hot novel pub