La chica se levanta y va en dirección al baño, rogándoles a todos los dioses que Daren no entrara en baño. Pero como no confiaba, se ducho lo más rápido que pudo y se envolvió en una toalla inmensa. Al salir, estaba sola en la habitación. Como no sabía que ponerse, registro los armarios y solo había ropa del maldito de Daren. Asqueada y repugnada escogió una sudadera parecía nueva así que se la puso. Y volvió a la cama.

—Eve, Ethan… Quizás nunca más los vuelva a ver. Comenzó a llorar. —Espero que ambos logren ser felices.

La puerta de la habitación se abrió y se volvió a cerrar. Daren estaba de vuelta solo con unos pantalones y exponiendo su pecho desnudo. Shery se seco las lágrimas y cogió una almohada para intentar protegerse, aunque sabía que aquello era una pérdida de tiempo.

—¿Por qué mierdas lloras? No me digas que es por ese hijo de puta del lobo. Le amenazo. Pero ella no respondió. —¿Entonces te quedaras callada? Muy bien.

Daren subió a la cama y la tomo de un tobillo, esta lo aparto he intento huir de sus manos pero la presión que le hizo la lastimo tanto que creyó que le había roto el tobillo. Grito para que la soltara pero este solo reía.

—Mientras más te resistas, más me excitaras.

—Suéltame por favor. Le dijo llorando.

Este le quito la almohada de su pecho, mientras tomaba sus manos y las pasaba por encima de su cabeza. Con la rodilla separo sus piernas y se acomodo en medio de ellas.

—Al menos te portaste bien y no te entregaste a ese bastardo, créeme te hubiera matado de solo saberlo.

Ella gritaba mientras intentaba quitárselo de encima. Daren subió la sudadera completamente dejándole expuesta ante su lasciva mirada. Ella giro la cara a un lado, no deseaba que la mirase, le daba asco de solo saber que la estaba tocando. Sintió las manos de Daren recorrer su cuerpo inocente, y a su mente le vinieron horribles recuerdos de lo que le había pasado en el callejón.

Lloraba desconsoladamente, comenzando a resignarse que sería violada por ese hombre. Nadie la salvaría esa vez. Quería morir y ser libre de una vez por todas. Recordó la sonrisa y las palabras de Ethan “te amo, estoy profundamente enamorado de ti” la consolaba saber que al menos alguien la amo de verdad.

Al poco tiempo sintió como su cuerpo era invadido por fuertes y bestiales embestidas, no estaba preparada para tanto dolor. Era como si la estuvieran desgarrando por dentro. Toda su inocencia se había ido a la mierda en ese instante.copy right hot novel pub