Resultó que Doria tenía razón, Flora estaba preparada cuando llegó. Había dispuesto que su asistente grabara entre la multitud cuando puso los ojos en Ning.
Así que antes de que salieran de la sala de exposiciones, el audio de la conversación entre Flora y Ning, así como la respuesta de Andrés al respecto, ya se habían subido a Internet.
Además, Flora había organizado de antemano un grupo de escritores compradas de Internet y cuentas de marketing. Por lo tanto, el asunto se difundió ampliamente en un instante.
Después de que Vicente atendiera la llamada de Doria para tratar el asunto, éste se ha convertido en un tema candente en Internet.
#La línea de tiempo de Leila como amante#
#La respuesta del hombre después de tres años#
#Opinión sobre Leila como amante#
Con la ayuda de Flora, estos temas se convierten en los más buscados de la lista.
La gente en la sección de comentarios mantuvo una intensa discusión. Los escritores fantasma de Internet dirigieron la conversación y el fan de Leila trató de aclarar el asunto.
En ese momento, el mundo entero parecía estar discutiendo este asunto.
La posición de Leila en la industria del entretenimiento no era la misma que la de Doria.
No podía retirar todos estos temas que habían causado controversia y actualidad, de lo contrario, la gente pensaría que no podía refutar, lo que equivalía a la aquiescencia.
Una vez que perdiera esta oportunidad, le resultaría difícil volver a aclarar este asunto.
Vicente tenía otros trabajos que hacer, así que se lo pasó directamente al departamento de relaciones públicas.
Al otro lado, Leila seguía grabando el programa. La grabación se detuvo y su asistente la llamó.
De camino a la sala, la asistente le contó brevemente lo sucedido hoy y le dijo que el departamento de relaciones públicas del Grupo Santángel había enviado a alguien.
Leila escuchó y enarcó una ceja:
—¿Por qué el señor Santángel es tan amable esta vez?
—Yo... no sé, tal vez cambió su naturaleza... Ahora no es el momento de hablar de esto. Leila, ¿qué debemos hacer ahora?
Al ver la cara de ansiedad de su ayudante, Leila dijo en tono relajado:
—Tranquila, no es la primera vez que me enfrento a este tipo de problemas. Una mano limpia no quiere lavarse.
La asistente lo pensó durante un rato y consideró que tenía razón.
Hace tres años, la situación era muy difícil, y mucho menos ahora.
Cuando estaba a punto de llegar al salón, el teléfono de Leila sonó, y cuando vio que era Doria la que llamaba. Le dijo a la asistente:
—Entra primero, yo atenderé una llamada.
—De acuerdo.
—Lo he visto. El departamento de relaciones públicas ha enviado a alguien a buscarme.copy right hot novel pub