-Muy bien esta vez te pasaste, sal de mi castillo- el rey Carlos se molestó.

-Vampiros ¡Vampiros! ¡Son vampiros!- Iliana transformó sus ojos, él la miró aún con más

desprecio.

-Harit es la última vez que te lo pido, la próxima hecho a patadas de aquí- Harit abrió la

puerta y salió al pasillo.

-No pienso salir a menos de que sea con mi hermana-

-Saquenlo- le dijo el rey a los guardias- fue un error haberte traído hasta aquí- mientras los

guardias sacaban a Harit al jardín, Lena intentaba calmar a la reina.

-Y es por eso que hasta ahora no les he mencionado nada a mi reino ¿Qué voy a hacer si

reaccionan del mismo modo?- la reina Iliana se sentó y trató de hacer reír a Dyl que se

despertó con su transformación y rabia.

-Ya le dije que no piense en esas cosas y que no es necesario decirles- le contestó Lena

pasándole un poco de agua.

-Lena pero ella también lo ha dicho, en algún momento se los tiene que comentar, no se

podrá guardar para siempre el secreto de que la familia real es vampiro-

-Pero tampoco tiene por qué decirles nada al respecto, no es su obligación-

-La reina es la que debe tomar la decisión-

-Chicos, chicos por favor, no discutan- la reina se levantó - mejor acompáñame a mi habitación que me siento agotada- ambos la llevaron y se durmió en unos instantes.

Cuando Harit ya estaba afuera el rey le pidió a los guardias que se alejaran unos instantes,

pues no quería que escucharan nada acerca de los vampiros.

-Así que hay abominaciones también en la realeza, eso me enferma el doble- dijo Harit con

molestia.

-Deja de decirles así no tienes derecho a faltarle al respeto a mi mejor amiga ni a su madre-

-¿Usted también es una…?

-Cuida tus palabras- le interrumpió el rey Carlos -¿Por qué tanto odio de tu parte? no

entiendo-

-Siempre me ha desagradado la gente derrochadora y abusiva, osea la realeza; y la cereza

del pastel es que me siento impotente... y no sé por qué le estoy diciendo algo como esto a

alguien como usted-

-Porque estás tan enojado que es la única forma que te queda para sacar tu ira- el rey

Carlos se detuvo un momento- ¡Vaya! me voy a acercar aún más al abuelo Filip, ya me está

pegando su sabiduría- Harit lo miró tratando de deducir a qué se refería.

-Perdón me desvié de tema; de acuerdo, primero lo primero no te voy a dejar entrar hasta

que disculpes con ella-

-¿Con quién?

-Con la reina Iliana y de paso con su dama de compañía, me parece que también deberías

disculparte con el bebé de tu hermana, porque aunque sea mitad vampiro sigue siendo hijo

de tu hermana y por ende tu sobrino, además de que ella lo ama con todo su corazón;

segundo, no se vayan aunque tu hermana se recupere ya que no tienen a dónde ir y todos

en mi reino saben que ese bebé es mío-

-¡Sabía que tenías una intención oculta!- Harit lo interrumpió y el rey Carlos trato de

mantener la calma.

-Ya me está cansando tu actitud, bien me dijo tu hermana que chocaríamos si nos

conocíamos-

-Me voy a llevar a mi hermana ahora- Harit comenzó a caminar y Carlos lo tomó del hombro

a lo que el chico se molestó y le quitó la mano, el rey puso su otra mano en el brazo de

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