El príncipe Aker se levantó a ponerse su pijama, yo corrí a ponerme mi ropa interior y a recoger mis cosas.

-¡Sí, espera yo te abro, tiene seguro!- Aker gritó, los dos nos miramos sin poder crear un plan para que pudiera salir sin que se diera cuenta la reina Marianne, miré debajo de la cama pero no era un buen escondite, así que me metí en su guardarropa, suelen ser muy amplios y dudo que ella abriría, me quedé en la puerta y Aker le abrió.

-Quizá yo también deba disculparme, mamá- no sabía que estaba pasando, sería bueno que los vampiros tuviéramos visión de rayos x, sin embargo, solo puedo ver de noche y las luces del mega closet estaban apagadas, comenzó a darme curiosidad el lugar.

-Sí, entiendo cómo te sientes, pero debes darle una oportunidad, sabes lo importante que es para mí-

-Sí pero me gustaría que pudiéramos salir al jardín a hablar de eso- tonta había prendido la luz y estaba viendo su ropa, entonces noté que remarcó un poco más la palabra salir ¿Esa será la señal? apagué la luz y abrí un poco la puerta.

-Oh vamos, no tienes que ser tan formal conmigo, no importa que estemos hablando aquí, es tu habitación y nadie nos escuchará- la reina Marianne estaba de espaldas al guardarropa, la puerta estaba despejada pero cerrada, ahora estaba rogando porque ninguna mucama estuviera en el pasillo.

-Entiendo mamá, no debí gritarte, pero estaba demasiado molesto qué tratara de agradarle a Iliana, que se esforzará más con ella que conmigo- el príncipe Aker no dejaba de verme, yo ya tenía mi pijama la tenía mal puesta y mal abrochada, la reina volteó, yo me agaché al sillón.

-Oye si quieres ser sincero mis ojos están aquí-

-Sí, ya que nos miramos de nuevo- eso también fue una señal, supongo.

-Helios tienes tu pijama al revés- dijo riendo.

-Estaba tan cansado que no me di cuenta, se quitó la playera y se la acomodó, yo me quedé embelesada viendo un momento, hasta que reaccioné.

-Aker, cuando te transformes fíjate donde dejas las plumas- abriendo la puerta me detuve un momento y voltee a su cama, la reina tenía varias plumas de él en las manos, miré el piso y había algunas mías, pues en el acto ambos nos transformamos inconsciente, ahora que lo pienso, espero que la reina no vea la espalda de Aker, pues creerá que alguien lo atacó por los rasguño ¡Oh! Cerré la puerta con cuidado y me fui a mi habitación demasiado agotada por la adrenalina de hace un momento, levanté la mirada y Einar estaba recargado en mi puerta con los brazos cruzados.

-¿Qué haces…?-

-¿Por qué no estuviste en tu habitación toda la noche?- se me veía un poco molesto.

-Perdón me quedé dormida y no me di cuenta de la hora- no lo podía mirar a los ojos, él suspiró y abrió la puerta.

-Entra para que vayamos a desayunar, hablamos de esto en el camino de regreso al reino- yo asentí y me metí corriendo a la habitación; me quedé pensando en todo lo que pasó, de nuevo recordé lo que había pasado, no podía dejar de pensar en eso, me sonrojaba cada vez.copy right hot novel pub