Esperé impacientemente por una respuesta mientras Ferz derramó todo su encanto y charlatanería sobre el muchacho que no podía escapar de su atención.

Esperé que pudiera recibir mi mensaje, era la primera vez que me atrevía a comunicarme con ella. Unos segundos después la esperanza abrió un camino en mi pecho cuando en la pantalla negra un conjunto de símbolos apareció decodificando el mensaje.

- ¿Nueva york? – no perdí tiempo en responderle.

- Así es, ¿puedes adelantar tu regreso?

Esta vez la respuesta tardó un par de minutos más que la primera y el recepcionista empezó a fastidiarse un poco de la atención de Ferz lanzándome mirabas de soslayo de vez en cuanto.

Les di una miraba despreocupada a ambos concentrándome en la pantalla hasta que recibí mi respuesta.

- ¿Dónde puedo encontrarte? Tal vez no pueda llegar antes de la fecha prevista sin causar alboroto a “Sus” planes.

Esta vez me costó encontrar una respuesta para ella. No era seguro decirle donde me encontraba, a estas alturas debían de monitorear todos sus movimientos. Cada paso, cada palabra. No quería ponerle más tensión de la que ya tenía.

- Entramos. – nos avisó Nick por nuestro comunicador. No tenía mucho más tiempo de sobra así que tomé una decisión y le respondí.

- Yo te encontraré. Confía en mí.

Envié el mensaje sin tiempo de arrepentirme y esperé a que la pantalla volviera a oscurecerse mientras Ferz seguía cargando de más y más charla al recepcionista, se veía abrumado de todo, pero aun así sin quitarle los ojos de encima. Estaba a nuestro favor que fuera una total belleza.

Cuando se vio al límite de su capacidad para aguantar tanta habladuría de un Lighters, abrió la boca con la intención de echarlo pero lo tomé del brazo.

- He terminado, deja de molestar tanto al muchacho. Necesitas aprender mejores modales. – lo regañé esperando a que me pasara de nuevo el lector donde tenía que firmar.

- Solo pensé en lo triste que debe de estar aquí, una buena sonrisa no le quedaría mal en ese bello rostro. – dijo sin vergüenza alguna, haciendo que el muchacho se sonrojara un poco de manera discreta.

Me ofreció de nuevo el lector e hice una copia idéntica de la firma de Vidra sobre la pantalla antes de entregárselo. No sería problema para validarlo.

- Ven. – lo jalé a un lado, hacia una pequeña sala común mientras volvía a abrir la comunicación con el otro grupo. La había silenciado evitando cualquier distracción de lo que teníamos que hacer.

- Ya te lo dije, es información clasificada. Ni yo tengo autorización para eso.

- ¿Te niegas a ayudar a una amiga?

- No seguirás estafándome con eso, Valery. No te tengo miedo. Será mejor que te vayas. – le aseguró el hombre con el que hablaba. Maldije por dentro tratando de no perder la calma mientras Ferz y yo fingíamos tener una conversación para pasar desapercibidos.

- Mis amigos están abajo esperando a que te decidas a hacer lo que tienes que hacer. Te estoy hablando en serio, mi amiga perdió todos sus papeles y este es el último sitio en donde podría encontrar algo, 5 minutos. ¿Puedes soportar mi presencia 5 minutos? – le pidió con dulzura, engatusándolo.

Así que de eso se había valido, tampoco era un mal plan.

Hubo unos minutos de silencio del otro lado por lo que optamos hacer nuestro camino hacia el ascensor, igual no teníamos tiempo que perder.

- Sabía que eras una maravilla, Carlos. – le aseguró Valery, unos segundos después el dispositivo de Ferz y el mío se alumbro en un mensaje. Ambos nos miramos unos segundos sin detenernos y lo recibimos confirmando que era un pase especial que cubría hasta el cuarto piso.

Le mostramos el pase al guardia frente al ascensor y este se hizo a un lado, no sin antes escanearnos bien con la miraba, para que pidiéramos el ascensor.

- Valery, consiguió el pase. ¿Están subiendo? – preguntó Nick de su lado. Esperamos que el ascensor viniera y estuviéramos dentro antes de poder responder.

- Lo estamos. ¿Cuál es tu situación? – le pregunté una vez que la puerta se hubo cerrado, tomándonos unos minutos para marcar el número cuatro.

- Todavía no tengo una vista completa de todas las salidas y entradas, es más difícil de lo que pensé. Estamos en la oficina número 34.

Apreté el botón del cuarto piso, luego de tener esa información y esperamos a subir.

- ¿Cómo consiguió Valery convencerlo? – le pregunté a Nick.

- Como lo hacen todos los Smooker. Extorsionándolo con sus sucios secretos. – aseguró mientras las puertas se abrían en un pasillo tumultuoso, no tan bien lustrado como el que acabamos de abandonar. Una simple etiqueta en uno de los laterales de la pared frente a nosotros mostraba: Papelería, y documentación.

Esperamos en el pasillo a Valery tratando de no hacernos notar mucho pero fue fácil distraerme cuando Ferz me preguntó.

- Quien es Vidra Rankova? Suena importante. – preguntó mirándome al rostro, por lo que me obligué a controlar el doble mis emociones.

- Es… alguien importante. La clase de persona por la que vale la pena luchar. – me limité a responderle sin devolverle la miraba, lo que hizo su curiosidad dispararse pero antes de que pudiera preguntar alguna otra cosa vimos a Valery acercarse desbordando seguridad.

- ¿Crees que todo salga bien? tú y Valery podrían intentar entrar en la bóveda sin problemas. – dijo con la vista fija en ella.

Lucia como una buena opción pero no confiaba todavía en ella.

- Sí, pero tú me caes mejor. Prefiero mantenerte a mi lado. – le contesté rápidamente antes de que pudiera escucharnos.

- Ya estamos a mitad de camino. Ahora ve a entretenerlo, Ferz.copy right hot novel pub