Violet.

Escuchamos un sonido alarmante, miro a Kale asustada y el me da una mirada de preocupación.

— ¿Los vampiros? ¿Otra vez? — pregunto con evidente fastidio.

— Si, no tienen que hacer con su vida.

Responde levantándose rápidamente.

Me toma del brazo y baja al sótano de la mansión donde... O no, esto no es un sótano, es un refugio.

— Quédate aquí. — ordena, yo asiento y el sale corriendo.

Frunzo el ceño y miro a las personas que están allí, ruedo los ojos y abro la puerta.

— ¡Luna! ¿A dónde va? — pregunta Catalina llegando hasta mí.

— ¿De verdad Kale cree que estaré aquí encerrada? No he entrenado tanto para quedarme encerrada como cobarde. — digo y Catalina me mira preocupada.

— Pero Luna, es peligroso... — intenta advertirme, ya se lo que me espera, pero no dejaré que los vampiros maten a mi familia mientras yo estoy aquí.

— Catalina, me iré, respeta la decisión de tu Luna. — digo con autoridad haciendo que ella baje la cabeza.

No me gusta usar esa autoridad. Pero la situación lo amerita.

Corro fuera del refugio y me apresuro a salir de la mansión siento la adrenalina corriendo por todo mi cuerpo y veo que no hay nadie por esta calle.

Corro en mi forma humana sorprendiéndome con la rapidez con la que llegue al centro de la manada donde la batalla está en pleno apogeo.

Camino sin prisa por toda la pelea mirando que todos están muy ocupados atacándose para venir a atacarme a mi, por alguna razón no siento miedo, sino una extraña energía en el ambiente.

Busco a Kale por todos lados y escucho una voz nueva, imponente que inunda todo el lugar.

—Llegó tu hora lobo.

Me estremezco al escucharlo.

Giro mi cabeza en dirección a esa voz encontrándome con un vampiro, este viste completamente de negro, tiene el cabello negro al largo y unos colmillos afilados se asoman por sus pálidos labios.

Su postura es segura e imponente.

—No lo creo.

Responde mi lobo mirándolo amenazante. Ese es mi mate.

Pienso con orgullo.

Ambos empiezan una feroz batalla, ambos son buenos pero empieza a preocuparme la cansada apariencia de Kale, este pelea bien, pero el vampiro no se cansa, veo como su respiración es agitada, impidiéndole en cierta manera hacerle frente a él vampiro.

En cuestión de segundos Kale flaquea y el vampiro va a lanzarse a su garganta, toda pasa en cámara lenta frente a mis ojos, sintiendo la impotencia embargarme corro intentando salvar a mi mate, pero siento algo en mis manos, miro la gran bola de hielo que está en esta, sorprendida y asustada a la vez pero encontrando la solución intento exitosamente lanzarla contra el vampiro quien cae al suelo.

Quedó en shock, mi menta procesando lo que acabo de hacer, que rayos...

¿Sera que.copy right hot novel pub