...Narra Noah...
Las clases de buceo fueron muy interesantes, además como Jack estaba a mi lado enseñándome era mucho más divertido, sin embargo, me estoy muriendo de ganas de hacer el amor, llevo un mes entero sin sentir sus manos deslizándose por mi cuerpo más allá de unas cuantas caricias, por ende, ya comienzo a impacientarme, de todas formas, estoy acostumbrado a que me toque cuando y donde quiere con cierto marguen de dos días como mucho, por ende, esperar tanto me hace sentir muy impaciente.
Sé que antes me tocó en la bañera, siempre que me toca se siente bien, ya casi no me gusta masturbarme por mi cuenta debido a que cuando él lo hace es deliciosamente excitante, pero ya llegado a este punto estoy planteándome recurrir a la masturbación, mis dedos no son tan gruesos ni largos como su pene, sin embargo, estoy desesperado.
¡Mierda! Soy un adulto con dos hijos que se siente desesperado por tener sexo como un adolescente de 15 años, esto es deprimente, pero ¿Qué más puedo hacer? Jack quiere desesperarme, algo que sabe hacer muy bien, no obstante, no quiero caer en su juego, tengo orgullo...
¿A quién engaño? Estoy tan caliente que haría cualquier cosa que me pidiese.
Luego de las clases de buceo me di un baño antes de irnos al comedor, en esta oportunidad nos duchamos separados, así que tuve que esperarlo a medida que observaba la belleza de este sitio. Más tarde, como estaba con una toalla envuelta alrededor de su cintura, me acerqué y me recosté en la cama para observar su cuerpo.
Por supuesto que Jack me hacía desearlo más, después de todo, se abrió la toalla y de forma instintiva me lamí los labios mientras observaba su entrepierna. Sé que parezco un pervertido, pero si es mi esposo entonces no pasa nada ¿no?
–Maldita ropa– murmuré cuando se puso ropa interior.
Jack no dijo nada, este simplemente sonrió y se puso un pantalón de color blanco y encima una camisa de color negra que se le ajustaba al cuerpo. Qué envidia, cualquier cosa se le ve sexy, pero me da cierto orgullo saber que es mío.
–¿Vamos? –me preguntó mientras yo permanecía recostado en la cama.
Tenía hambre, pero quería que aquel perfume seductor que se puso se impregnara en mi piel, por ello, como estaba a la orilla de los pies de la cama observándome, me acerqué y envolví su cuerpo con mis brazos con tal de abrazarlo casi de forma inocente, sin embargo, yo buscaba besarlo de forma lenta mientras poco a poco el beso se va tornando más mojado.
Hacer esto me jugó en contra, ya que me estaba calentando aún más, pero me ilusioné cuando me dejé caer a la cama y él cayó encima de mí preocupado por lastimarme, sin embargo, rápidamente me volvió a besar y abrió mis piernas para acomodarse entremedio.
–nnh...–suspiré en medio del beso sintiendo un cosquilleo en la entrepierna debido a que él estaba rozándose suavemente contra mi cuerpo– Jack...–lo nombré tras cortar el beso– deja de jugar...
–Te daré tu regalo, pero debes usarlo ahora cuando vayamos a comer– me decía.
Yo pensé que sería algo normal, como una prenda o algo así, sin embargo, me compró un vibrador con el que planeaba torturarme un poco más, incluso bajó mi ropa y puso lubricante en mi entrada antes de introducir el pequeño aparato en mi interior. Se sentía raro, me daba miedo que luego no pudiese sacarlo, sin embargo, acepté su regalo sólo porque estaba desesperado.
Claro que al principio no lo encendió, Jack se esperó hasta que llegamos al comedor y en medio de la gente activó el vibrador en un nivel bajo, pero se sentía raro, así que igualmente me estremecí mientras observaba que había para comer.
En el comedor había un poco de ruido, la gente almorzaba con felicidad mientras mi interior se mantenía vibrante, además cuando llegó la hora de sentarme, Jack le subió otro nivel.
Por lo que antes vi, el vibrador tiene seis niveles, por ende, estoy seguro de que me torturará hasta activar todos los niveles.
Durante la comida, me sentía inquieto, mi concentración no estaba en mi almuerzo, por ende, estaba comiendo mucho más lento que él, incluso tomaba pausas para apretar mis labios y contener mis leves gemidos, aunque cuando le subió al cuarto nivel, mi espalda se arqueó obligándome a sentarme más recto de lo normal, incluso crucé mis piernas mientras mi amado sonreía.
No pensé que utilizar un vibrador me haría sentir de esta forma, claro que, si me dan a elegir entre mi esposo y el vibrador, definitivamente elijo a mi esposo, aunque tampoco se siente nada mal, para un sujeto desesperado como yo, se siente bastante bien.
Ahora mismo me siento un tanto mojado, es vergonzoso estar de este modo en medio de un comedor prácticamente repleto, claro que, si bien antes no me importaba, ahora me preocupaba ser descubierto, sobre todo porque mis caderas se mueven sin mi consentimiento y siento enormes ganas de tocarme.
–Hola, buenas tardes– nos saludó una chica acompañada de un chico, los cuales trabajaban en el sitio donde nos estábamos quedando– lamento interrumpirlos en su almuerzo, pero estamos informándole a todos que habrá una fiesta más tarde para nuestros visitantes.
–Genial– dijo mi esposo mientras le subía otro nivel– ¿no suena increíble, mi amor? –me preguntó mientras yo apretaba mis puños con fuerza como una forma de controlarme para no mover mis caderas.
–C-Claro...copy right hot novel pub