...Narra Noah...
¡Hoy es mi cumpleaños! Este no es el primer cumpleaños que paso con mi esposo, pero cada vez que es mi cumpleaños, se siente como si fuese el primero debido a lo dulce que es conmigo, partiendo por el hecho de que me llevó el desayuno a la cama, me envió un gigantesco ramo de rosas al trabajo junto a una nota que decía "Feliz cumpleaños, mi amor"
Como soy un adulto que trabaja en un colegio, debo trabajar el día de mi cumpleaños, así que me siento muy ansioso por la idea de regresar a casa para ver qué más me ha preparado, ya que Jack me suele llenar de regalos todo el día.
Algunos de sus regalos son muy dulces, mis labios siempre forman una sonrisa cuando los recibo, aunque hay otro tipo de regalos que me asustan, ya que es un pervertido que me encanta, pero ahora que estoy trabajando, me asusta.
Varios de mis compañeros de trabajo se sorprendían por el tamaño del ramo, obviamente lo dejé en la sala de profesores, así que todos vieron mi regalo, incluso algunas profesoras me envidiaban diciendo "Ojalá tuviera un esposo así de cariñoso" pero lo que ellas no saben, es que mi esposo únicamente es tierno con sus hijos, mientras que conmigo es más rudo, me da cosas que me gustan, como el ramo de rosas, sólo que también suele regalarme cosas que no son únicamente para mí.
Jack es un 50 y 50, por un lado, se esfuerza por darme lo que me gusta, pero el otro porcentaje es para ponerme en aprietos, por ello, cuando luego de terminar una clase recibí su llamado, me apresuré para acercarme al estacionamiento donde me esperaba un simpático repartidor que me dijo "Que lo disfruté" mientras yo me ponía rojo de la vergüenza.
Era otro ramo, no era tan lindo como el primero, pero igualmente le daría un buen uso al tratarse de un ramo de condones que obviamente oculté en el maletero de mi auto.
El ramo traía condones de muchos tipos y colores, lo guardé bastante rápido para que nadie lo viera, sin embargo, vi unos con sabores y hasta fosforescentes, así que tras procesar esto, me reí en medio del pasillo al nada más imaginarlo con un condón fosforescente en medio de la oscuridad.
Se supone que sólo me queda una clase más, hoy hago clases hasta las 13:00 pm, así que le envié un mensaje regañándolo y agradeciéndole por el regalo, sin embargo, rápidamente me asusté cuando me avisó que recibiría otro regalo en el trabajo.
Yo estaba nervioso, en medio de la clase no dejaba de pensar en qué me regalará ahora, me imaginé muchas cosas, tanto dulces como pervertidas, así que cuando terminé mi última clase -la cual me resultó eterna debido a mi impaciencia- corrí a buscar mi ramo de rosas a la sala de profesores para marcharme.
Mi tercer regaló me hizo muy feliz, ya que él me pasó a buscar a mi trabajo y se encontraba apoyado en mi auto, por ende, me acerqué corriendo para robarle un corto beso, no podía darle un apasionado beso como me hubiese gustado, ya que hay niños y padres, sin embargo, nos subimos a mi auto lo más pronto posible con tal de ir hasta otro sitio.
No sé a dónde íbamos, pero pasamos cerca del parque en donde nos conocimos, al nada más ver aquel parque mis labios dibujaron una sonrisa recordando todo lo que he vivido con mi amado, no pude controlar mi sonrisa, estaba tan feliz de haber evitado su boda que incluso me encantaría repetir la experiencia nuevamente.
Sé que lloré, pero no me importaría llorar nuevamente sólo para enamorarme y enamorarlo otra vez.
Aquellos pensamientos se hicieron más frecuentes tras llevarme a un muelle en donde nos esperaba el crucero familiar en el cual tuvimos nuestra luna de miel, la única diferencia es que ahora estaba nuestra familia y organizaron una fiesta para celebrar mi cumpleaños.
Allí estaban todos, mi suegro, mis hijos, mis amigos, Titán, mi hermano, su esposo e hija, también estaban familiares de Jack, así que la fiesta era bastante grande, además había una montaña de regalos que esperaban para ser abiertos.
Hoy es viernes, por ende, podía permitirme salir unos días de la ciudad, además Jack guardó el ramo de condones en la habitación diciéndome que los probaremos más tarde, algo que me gusta, pero la última vez que estuve aquí, lo hicimos varias veces en varios sitios, así que ahora que hay tanta gente, me hace sentir nervioso, porque lo conozco y sé que es capaz de manosearme en medio de cualquier sitio.copy right hot novel pub