A la mañana siguiente, al despertar, mi cuerpo se sentía cansado, cuando me giré dentro de la cama en busca de acomodarme, sentí una ligera punzada en mi cadera, la cual me recordaba cuan descuidado fui, además cuando sentí las manos de Víctor acariciando mi espalda, ciertas palabras que dije lograron teñir mis mejillas casi al instante.
¡Mierda! Me siento tan avergonzado ahora mismo, no pude evitar ocultar mi cabeza con ayuda de la almohada, estaba literalmente boca abajo deseando morir, si bien era lo que sentía, no estaba en mis planes confesarlo, ni dejarme llevar hasta tal extremo de sentir mi cuerpo adolorido.
A decir verdad, suelo analizar cada una de mis acciones, ahora mismo no estoy en condiciones de pensar de forma estúpida, no cuando mi vida puede correr peligro, sin embargo, por alguna razón, siempre que estoy con él nada de lo que planeo logra concretarse ¡yo pensaba irme mientras dormía! ¿Cuándo me dormí? Además, decirle aquello no estaba en mis planes, por tanto, me siento un estúpido que no logró controlar sus pensamientos.
Me siento tonto, Víctor se apegó a mi cuerpo con tal de buscar mi mirada tras darse cuenta de que ya he despertado, incluso fue depositando besos en mi cuello de forma inocente, algo como eso me resultaba tan dulce que no pude evitar sonreír y cuando giré mi rostro para verlo, mis labios se acercaron a los suyos diciéndole "Buenos días" antes de besarnos en un tono lento y apasionado.
Ahora mismo no sé qué haré, si bien mantengo sentimientos por él, eso no quiere decir que vaya a olvidar mi objetivo principal, sinceramente no descansaré hasta que consiga vengarme, puede sonar muy ambicioso, pero a pesar de que parece imposible, aun así, lo conseguiré.
–Vamos a desayunar– me sugirió Víctor mirándome con ternura.
No pude evitar sonreír, me siento muy bien cuando estoy con él, así que decidí olvidarme un instante sobre mi venganza y de esta forma, disfrutar del tiempo que pasamos juntos, incluso dejé que me preparara el desayuno sólo para sentirme mimado.
Nosotros hablamos un poco, era como si nada hubiese pasado, como si todo siguiera igual que antes de que se enterara sobre mi identidad, no obstante, luego de ducharnos y vestirnos, Víctor me sugirió visitar a Jack ¿para qué? Para hablar, incluso me decía que quizás podía ayudarme ¿ayudarme a matar a su propia madre y a su tío? Sonaba ilógico, Jack no sabe los secretos de esa mujer, así que dudo mucho que me crea si no le llevo pruebas.
Víctor estaba convencido de que este podría ayudarme, era una forma para que el resto de su familia no quisiera matarme, así que luego de discutirlo decidí confiar en él, sólo que antes tuve que conducir hasta el banco con tal de retirar un pendrive que dejé en una de sus cajas de seguridad. Se supone que algunos bancos tienen ciertos casilleros con clave, allí la gente suele guardar cosas muy importantes debido a que el banco cobra cierto monto como un arriendo y se aseguran de mantener tus pertenencias seguras.
No pensé que usaría aquel pendrive, así que cuando lo retiré, me aseguré de copiar la información en otro pendrive para no perderla en caso de que algo salga mal y posterior a eso, lo devolví a su sitio con tal de que nadie intentara robarlo. Una de las razones por las cuales mantengo aquel pendrive en un casillero de seguridad del banco, es porque cuando se enteraron de que tenía esa información, entraron a mi casa y la revisaron por completo, cuando llegué todo estaba desordenado, incluso había cosas rotas que evidenciaban claramente que alguien había entrado.
–Ya, ahora si puedes llevarme donde el cuñado– dije en un tono burlón mientras me sentaba de copiloto en su auto.
De camino a casa de Jack, todo me resultaba muy tranquilo, incluso tuve que ocultarme en los asientos traseros para que no me vieran cuando pasamos por fuera de la casa del padre de Jack, aunque entrar a casa de este fue bastante más sencillo de lo que pensaba, no había ningún hombre armado, no como la de su padre.
–Ok...–dijo Víctor nervioso, sacándose el cinturón de seguridad– no la líes.
–Me ofendes– dije bajándome de su auto para seguido caminar hasta la puerta de entrada, en donde una sirvienta me abrió y nos dirigió hasta la sala de estar con tal de esperar a Jack.
Yo me senté en un asiendo que tenía vistas directa a la salida, mientras que Víctor le daba la espalda, debo reconocer que me sentía un poco nervioso, aunque no pude evitar sonreír tras oír a mi hermano quien estaba jugueteando con Jack, incluso se le colgó del cuello por la parte de atrás, no sé a qué jugaban, pero la voz de mi hermano sonaba muy feliz.
Claro que la sonrisa de ambos desapareció cuando me vieron, yo no pude evitar sonreír y con un tono divertido dije– hola cuñado.
–¿Eres idiota? –le preguntó Jack dándole un golpe en la cabeza a Víctor como un regaño– ¿por qué lo trajiste aquí? ¡Mi padre está afuera! –no pude evitar reír, parecía preocupado, aunque simplemente me acomodé en el asiento observándolos discutir– ag...–soltó sentándose al lado de Víctor antes de mirarme, mientras que mi hermano se sentaba al lado de Jack viéndome atentamente.copy right hot novel pub