—Gracias por no juzgarme, lo valoro demasiado viniendo de ti —Me dice besando suavemente mi mano.
—No tengo por qué hacerlo, fueron errores que cometiste antes de conocernos; sería injusto de mi parte juzgarte por algo del pasado que no tiene influencia en nuestro presente —Le digo mirándolo fijamente.
—Gracias, de verdad. Y ¿sabes?, después de un tiempo me di cuenta de lo idiota que había sido con todas esas chicas, volví después de un año con la tarea de buscar a las que recordé para pedirles disculpas una a una —Me dice dejándome sorprendida.
—¿Pudiste disculparte con todas? —Le pregunto con verdadero interés.
—Bueno, con la mayoría. Muchas ni siquiera se acordaban de la noche loca, otras lo valoraron y me disculparon, otras ni siquiera le dieron importancia a mis disculpas sino que me pidieron repetir, así que termine disculpándome por lo que les hice en el pasado y por rechazarlas en ese momento —Concluye haciéndome reír.
—Fue un gesto demasiado lindo, Dylan; no cualquiera lo habría hecho, eso dejó claro que maduraste y que te hiciste cargo de tus actos. Estoy orgullosa de ti, luchaste por lo que querías y ahora eres uno de los locutores más reconocidos de la ciudad, lograste todo eso persiguiendo tus sueños, lo lograste tu solo y eso es admirable —Le digo resistiendo la intensa mirada que me está dando todo el tiempo, nos empezamos a acercar para luego fundirnos en un beso que termina por decir mucho entre nosotros. Cuando nos separamos caigo en cuenta en algo y decido aclarar mi última duda.
—Dijiste que buscaste a todas las chicas con las que tuviste algo, Tú… ¿Buscaste a la chica de la última noche? —Le pregunto tímidamente refiriéndome a la chica que le gustaba a su hermano.
—Sí, lo hice, pero jamás la encontré y por lo que supe se salió de la universidad porque se fue a vivir lejos de allí, así que nunca pude hablar con ella. También averigüé sobre mi hermano, pero me dijeron que se había retirado de la universidad de un día para otro, así que supongo que se cambió a otra universidad que le haya dicho mi padre —El gesto triste en su rostro demuestra lo mucho que le duele no tener más contacto con su hermano mellizo.
—Eres todo un guerrero Dylan, en serio lo eres —Le digo perdiéndome en su mirada.
—Gracias —Me dice dejando un beso en mi frente. —Después de todo ese problema que me abrió los ojos me prometí a mí mismo nunca más tener ninguna aventura con ninguna mujer, no quería volver a lastimar a nadie y tampoco me creía digno para tener una relación seria con nadie, pasé todo estos años evitándolo por miedo a no poder dar la talla, pero un día simplemente me topé con una hermosa chica en medio de un desastre de papeles y cuando esa chica me miró a los ojos de manera tímida, para después sacar valentía y ponerme en mi lugar apuñalándome con una tachuela, supe que era mi fin.copy right hot novel pub