Me paso prácticamente el resto de la noche entre los brazos de Dylan, de verdad me encanta cuando me abraza, pues me hace sentir segura y protegida. Los besos y las caricias no faltan mientras que estamos recostados en el gran sofá de su sala, en estos momentos me encuentro con él detrás de mí, abrazándome fuertemente y en la famosa posición de cucharita, me siento realmente bien entre sus brazos; con esa maravillosa y alucinante vista y con las palabras tiernas que me dedica, pero a pesar de que estoy bastante cómoda y no tengo de que quejarme, sé que es hora de que me vaya a mi casa.
—Bueno, creo que ya es un poco tarde, lo mejor será que me lleves a mi departamento por favor. —Le digo intentando ponerme de pie, pero él me abraza más fuerte.
—Anda, cinco minutitos más. —Dejo de luchar y me acomodo de nuevo entre sus brazos, a pesar de que ambos sabemos que esos cinco minutitos serán mucho más largos. Él acomoda su cabeza entre mi cuello y mi hombro y pasa su brazo por debajo de mi cabeza para que lo use como almohada, luego empieza a dejar delicados besos en mi cuello que erizan mi piel.
—Dylan. —Susurro bajito.
—Mmmhmm.
—¿Tú, tienes algo por hacer este próximo fin de semana? —Mi pregunta hace que se detenga y me maldigo por haber hablado, pues quiero que siga con el reguero de besos que me estaba dando.
—En realidad no, ¿por qué?, ¿alguna propuesta indecente? —Dice mordiendo mi cuello haciéndome soltar una risita.
—No, la verdad es bastante decente, lo siento. —Le digo en un tono pesaroso siguiéndole el juego.
—Bueno, que lástima me tocará aceptar esa propuesta, ya que no hay más.
—Prometo que la próxima será bastante indecente. —Mi cuerpo se sacude junto al suyo cuando comienza a reírse y no tardo en empezar a reírme también.
—Vale, la esperaré con ansías. —Dice en un susurro ronco para luego tomar el lóbulo de mi oreja entre sus dientes y apretando un poco mi cintura dejándome con la respiración entrecortada. —Entonces, ¿Cuál es la propuesta decente?
—¿Eh? —Pregunto totalmente confundida.
—Lo que estabas por decirme, ¿qué era?
—La verdad… se me olvidó.copy right hot novel pub