Modo oscuro
Idioma arrow_icon

(COMPLETA) Descubriendo El Placer

Capítulo 59

POV Sophie

Creo que podría decir que he vivido uno de los mejores fines de semana de mi vida, he pasado muy bien con Dylan; disfrutando el uno del otro lo más que hemos podido. Además, debo confesar que hasta siento un leve dolor en mi entrepierna por las nuevas cosas que me ha enseñado mi gigante, nos hemos amado incontables veces en la habitación, pero también estuvimos juntos en la casita del árbol, algo bastante loco, pero muy excitante a la vez.

Pasé tiempo con Juana trabajando en el preciado jardín de mi madre y no desaprovechamos el momento para mandarle algunas fotos a ella y a mi padre, Dylan ayudo en algunas cosas para los arreglos de la hacienda, aunque todos le insistimos en que no era necesario, él lo hizo igualmente y debo decir que avanzaron bastante con su ayuda, por supuesto Juana y yo nos encargamos de plasmar el momento en fotos y enviárselas a mis padres, quienes quedaron completamente encantados con su solidaridad.

El lunes por la tarde nos despedimos de todos, por un lado estaba feliz, pero a la vez triste; feliz por haber podido pasar el fin de semana en la hacienda con Dylan y los trabajadores, además por que pude comprobar que todo marcha muy bien, pero triste porque sentía que se había acabado demasiado pronto y quería compartir más con ellos, en el camino Dylan y yo hablamos bastante sobre nuestro maravilloso fin de semana, él se encargó de contarme con lujo de detalles todo lo que aprendió con los hombres que trabajo y yo le hable sobre mis tareas con Juana, aunque más que todo nos concentramos en el jardín de mi madre.

En cuanto entramos a la ciudad nos desviamos a un súper mercado, me hacen falta algunas cosas en el departamento y Dylan se ha ofrecido a acompañarme a conseguirlas. Encontramos todo lo que necesito y pienso que me gustaría invitarlo a cenar conmigo, pero me abstengo pues no quiero parecer intensa o algo así. En cuanto llegamos a mi edificio ambos nos quedamos en silencio sin querer despedirnos y unos minutos nos miramos fijamente.

—¿Quieres quedarte a cenar?

—¿Quieres cenar conmigo? —Preguntamos al mismo tiempo.

Nos empezamos a reír cuando comprendemos que ninguno quiere despedirse aún, él se acerca lentamente a mí y deja un suave beso en mis labios.

—Me encantaría quedarme a cenar, solo si me permites ser tu ayudante de cocina, no quiero que hagas todo el trabajo tu sola. —Asiento animadamente por sus hermosas palabras y bajamos juntos de su armatoste, recogemos las bolsas de la compra y nos adentramos al edificio.

Después de haber saludado a Thomas, presentarle bien a Dylan y hablar un poco con él, seguimos con nuestro camino hacia mi departamento tomados de la mano, al entrar Dylan me ayuda a revisar que todo esté en orden y luego empezamos a preparar la cena.

Ponemos música en su teléfono y él me hace reír cuando empieza a bailar mientras pica unos ingredientes, a pesar de que sus movimientos son exagerados y graciosos, no puedo evitar notar que tiene un movimiento de caderas muy sexy, me quedo embobada mirando su prieto trasero y hasta me dan ganas de darle un buen apretón, pero me abstengo pues de solo imaginarlo me pongo como un tomatito, a pesar de que hemos hecho el amor ya varias veces, hay cosas que no me atrevo a hacer y pellizcarle el trasero es una de ellas.

Cocinamos entre risas, besos, pasos de baile y abrazos, luego nos sentamos a cenar y debo decir que todo nos ha quedado muy bueno, durante la cena me habla sobre su amigo Danilo y mi interés por conocerlo aumenta un poco más, desde que me comentó sobre su actitud loca en el camino a la hacienda el sábado por la mañana, pensé que sería muy bueno conocerlo, pues por lo que he podido detectar el chico es alguien importante para Dylan y el hecho de que quiera presentarnos me hace demasiado feliz, poco a poco cada uno va conociendo y compartiendo más de la vida del otro, lo que me hace saber que estamos avanzando.

Cuando terminamos de cenar me ayuda a lavar los platos y organizarlo todo, en su celular empieza a sonar una canción lenta y él me toma de la cintura haciéndome sonreír, pongo como puedo mis manos en sus musculoso brazos y empezamos a movernos suavemente, cuando esconde su cabeza en mi cuello suspiro audiblemente, él acaricia mi espalda y besa mi cuello logrando que se me escape una risita. Seguimos bailando lentamente en la mitad de mi cocina y creo que este es un momento perfecto.

—Te quiero demasiado Sophie. —Sus palabras tienen tanta intensidad que se me eriza la piel.

—Y yo a ti también Dylan, muchísimo.

—Sé que no soy de muchas palabras a veces y otra veces bromeo demasiado, pero quiero que sepas que soy completamente serio cuando te digo que me encanta estar contigo, tenerte en mi vida, me alegra los días saber que hablaremos o que te voy a ver. Lo que siento cuando te veo, guau no creo que pueda describirlo, me siento realmente bien al saber que eres mía, gracias por llegar a mi vida y apuñalarme con esa tachuela.

Cuando termina de hablar dejamos de bailar y lo miro, se me escapa una risita acompañada de una lágrima, por esas hermosas palabras que me han robado el aliento, él limpia la lagrimita que se me ha escapado y yo me lanzo a sus brazos para besarlo apasionadamente, me estrecha entre sus brazos y cuando terminamos nuestro beso nos quedamos con nuestras frentes unidas.copy right hot novel pub

Comentar / Informar problema del sitio