Aquel tiempo en el hospital había sido sumamente difícil. Afortunadamente Isabella, se recuperó con prontitud como había dicho el galeno y tal como lo previno éste, Ivette había tardado un par de días más, pero con el tratamiento adecuado y los cuidados del Príncipe, que muy poco se apartaba de ella, había vuelto a Palacio en una semana, sintiéndose un poco débil pero indudablemente recuperada.

No habían querido interrumpir la luna de miel de Suseth y Matt, por más que Isabella insistió en que debían comunicarle de lo sucedido, Ivette aseguró lo contrario dado que ambas estaban bien, así que La Reina Norusakistana, decidió respetar la decisión de su amiga y mantener a Matt y Suseth, al margen de lo ocurrido.

Ahora, Ivette tenía dos días de haber vuelto a Palacio y había recuperado su color natural y el delicado rubor de sus mejillas, las ojeras habían desaparecido, ahora se veía más como Ivette y menos como un cadáver.

Un llamado a la puerta la sobresaltó.

-Adelante- concedió el permiso.

-Bue día señorita Cooper- la saludo Zahir.

-Alteza- le sonrió- que guapo amanece el día de hoy.

-Lo mismo puedo decir de usted, se ve rozagante y hermosa.

-Muchas gracias por el cumplido- le sonrió.

-Nada que agradecer. ¿Lista para desayunar?

-Muy Lista.

Las cosas en Palacio habían cambiado. Zabdiel, desconfiaba de todos, ordenó públicamente que la comida a la familia fuese preparada con exclusividad por Naiara, y servida con ayuda de Haimir, nadie más podía tener acceso a la cocina o a los aperitivos de la familia, mientras tanto no lograran descubrir quién era el traidor. El Jeque y El Príncipe, estaban en constante alerta y mantenían al personal en vigilancia.

-Luces muy bien hoy, querida Vetty.

-Me siento muchísimo mejor- le sonrió a Isabella.

-Es un gusto saber que ya te encuentras bien- aseguró Zabdiel.

-Ha sido horrible que eso te ocurriera en nuestra casa- añadió Hayffa

-Pero no debes preocuparte, sigo trabajando para encontrar al responsable, este hecho no quedará impune.

-Gracia, Excelencia- Ivette, le sonrió.

-Por supuesto que no quedará impune - aseguró Zahir- esto deberán pagarlo, y lo harán muy caro.

-Gracias- repitió ella- ¿dónde está Nael?- preguntó.

-Con Naiara- aseguró Isabella- le da su baño matutino.

-Ese niño se ha robado mi vida- aseguró Hayffa- es tan hermoso y tan dulce, inevitable no amarlo con locura.

-Un digno Norusakistan- aseguró Zahir.

-Mitad ingles, no lo olviden- dijo Ivette con una sonrisa- es un orgullo que lo sea.

-Así es- Isabella, serió feliz.

Después del desayuno pasó a ver a Nael, quien descansaba en su cuna, la miró con esos bellos ojos y ella se sintió feliz de tener un sobrino tan hermoso. Lo cuidó y mimó por un rato. Luego decidió irse al cuarto verte a leer un poco.

La mañana se había ido con rapidez, pronto sería medio día.

-Disculpe que le interrumpa señorita Cooper.

-No te preocupes Azhohary- le dijo sonriente- ¿qué sucede?

-Tiene visita- le anunció.

-¿Visita?, ¿yo?- preguntó extrañada.

-Así es, el joven James, desea verla- Ivette, se sorprendió realmente. ¿qué hacía James en Norusakistan?, pensaba que todo había quedado bastante claro entre ellos, ahora él venía y se presentaba allí.

¿Ocurriría algo malo?

-Bien, hazle pasar por favor, le atenderé aquí.

-Como usted diga, señorita- se retiró para luego volver con un serio James.

Azhohary, se marchó dándoles privacidad.

-Ivette. . .

-James. . . qué bueno verte- se acercó a él y lo abrazó. Él correspondió a su gesto, luego se separaron- es extraño verte aquí.

-He venido a saber de ti- le sonrió.

-Bien, sentémonos- le ofreció y él obedeció- ¿puedo ofrecerte algo?

-No Vetty, estoy muy bien. ¿Cómo has estado?- dudó en decirle la verdad, no quería preocuparlo ni que llamara a Su, y lograra interrumpir su luna de miel.copy right hot novel pub