Cabalgamos por unos tres días tal cual dijo Mehmed, esto de estar tanto tiempo en una silla que se mueve y respira es algo raro, porque termina doliendo el trasero después de mucho tiempo, mi esposa por supuesto no tuvo dicho problema porque la señorita estaba sentada en mis piernas, dejándolas casi entumecidas, no me molesta que me use como mueble, pero al menos podría moverse de vez en cuando, creo que ya ni siento las piernas

¿Así se siente Mera después de hacer el amor?

A lo lejos se comienza a ver los inicios de la que en el futuro será la ciudad del amor y las luces, la capital de la moda y el arte. La ciudad que me vio brillar cuando gané la medalla de oro. Los recuerdos de aquel día se meten en mi mente y casi siento mi arco arder en mi espalda, como si aquella arma pudiese sentir lo que mi corazón siente al recorrer las calles adoquinadas, las personas salían de sus casas al escuchar los cascos de los caballos y gritaban de felicidad ante la bandera otomana haciéndome sentir orgullosa, muchas de estas personas nacieron, vivieron y murieron estando en la guerra y ahora gracias a mis tropas están siendo liberadas de aquella guerra infinita

- Para ser la capital de un reino importante, no tiene mucho lujo- Murmuró Mera en mi oído acomodándose en mis brazos con Nasra durmiendo

- Han estado en guerra casi 100 años, todos sus recursos han ido a la guerra y el poder se fragmentó, en cambio en el Imperio la máxima autoridad siempre ha sido mi padre y sus sucesores y el dinero era manejado por él y sus visires, por eso aunque mucho se iba al poderío militar, otro se iba para mejorar el imperio y tener más ganancias, aquí no pudieron hacerlo- Explique a mi esposa mientras Blackte reducía la velocidad, estamos en una ciudad y no quiero atropellar a nadie

- Entiendo- murmuró justo cuando llegábamos a un gran campamento militar que estaba en el centro mismo de la ciudad, donde en mi año debería estar la maravillosa y famosa Torre Eiffel

Mehmed se detuvo justo en frente de todo mi ejército que estaba perfectamente ordenado listo para recibirme, ja, que bien se siente el respeto de la gente. Todos se pusieron rectos en el momento que baje con la cara más seria que he visto, como si todos tuvieran un palo en el trasero, pero no me quejo. Se ven bastante aterradores la verdad

- ¡Salve la Sultana Jesin!- Gritaron todos al unísono, uff, que bien se siente el respeto carajo

Avance sobre mi caballo siguiendo a Mehmed notando que el campamento tiene la formación circular que instaure en mi ejército, algo que nos sirvió mucho contra Hungría por sus ataques por la espalda y en la oscuridad de la noche, apenas uno de los soldados ve un enemigo el resto ya está listo para matarlo, en el centro, la zona más protegida, es donde estará mi carpa y la de Mera, no voy a escatimar en protecciones estando en un país ajeno, aunque sea aliado. No repetiré los errores que cometí contra España y cuidare de mi esposa y mi hija con mi vida

- ¿Dónde está el futuro Rey?- Preguntó Mera tranquila desde mis brazos a su hermano que la miraba picara

- Seguramente preparándose, aunque nunca entenderé la manía de los franceses por usar pelucas y peinados raros- Lo dice porque usa corte militar al igual que la mayoría de los hombres en el imperio, las mujeres son más de usar el pelo largo o recogido con broches de oro y gemas preciosas, acá usan telas para hacerse grandes y estrafalarios peinados que salen en los retratos antiguos. La verdad no me gusta personalmente

- Aunque son bastante animados en las fiestas- Dijo Mehmed bajándose de su caballo, Kotem ayudo a Mera a bajarse liberando al fin mis piernas, uff, creo que no las puedo mover, Mehmed se está riendo de mí, idiota, ya Kotem te dejara sin caminar a ti- Llenas de vino, comida y sexo

- ¿Qué?- Preguntó Mera alarmada

Me quede pensando un momento hasta que recuerdo que en mis clases de historias solían decir que la realeza francesa era bastante desenfrenada en las fiestas y que hacían de todo, desde beberse hasta el agua de los floreros a tener orgias gigantescas, fue por esas fiestas que descuidaron su reino y terminó con la revolución francesa, si es que mi memoria no me falla. Oh mierda, querrán que Mera o yo participemos en esas cosas ¡Antes muerta que dejar que otro hombre toque a mi esposa! ¡PRIMERO LE CORTÓ LAS MANOS Y LOS CASTRO!

- Orgias enormes, a veces se ponen máscaras y puedes acostarte con quien se te dé la gana y nunca sabrás quien es ¡Y las veces que quieras!- Mehmed ¿Acaso no ves la mirada fulminante de Kotem? Mera es insegura carajo

- Eso es algo asqueroso- Murmuré abrazando a mi esposa por la cintura para que no crea que me veo tentada a esas cosas- ¿Quién sabe cuántas enfermedades te pueden contagiar ahí?

- No existe enfermedad por tener sexo

- Existen, y son muy dolorosas- Tanto Mehmed como Kotem se pusieron alerta- Es más común en personas que tienen sexo seguido con muchas personas diferentes, si tienes pareja única ya es casi imposible que te dé a menos que seas transmisor

- Como arruinar una orgia versión Jesin- Murmuró mi hermanito cruzándose de brazos, haciendo que Kotem lo mire con una ceja alzada- Bueno ¡Sigamos!- Ja, dominado- La coronación será al anochecer, así que tenemos varias horas, apenas el rey aparezca por aquí te avisare para que te presentes, seguramente estés cansada de cabalgar- Me duele el trasero y las piernas, así que asentí bajándome de Blackte, por suerte ya podía sentirlas pero me hormigueaban y odio la sensación. Además tengo hambre

- Descansaremos un poco hasta que llegue el rey aunque preferimos comer antes- Dijo mi Bella Dama por mí. Mehmed asintió y comenzó a caminar hacia lo que supongo son las cocinas

- Ah- Dijo devolviéndose sobre sus pasos- Seguramente venga con su general al mando

- ¿Y qué?- Murmuré estirándome

- Es una mujer, su nombre francés era raro decirlo en turco, así que solo le decimos en su forma hispana, Juana de Arco- Lo mire sorprendida, vaya, alcanzó el rango de general la juanita

- Oh, no pensé que una mujer alcanzaría tal rango- En Estambul no se permiten que las mujeres entren al ejército, no es por mala, pero la verdad muchas de las mujeres tienen una mentalidad tan cerrada que aunque habrá las inscripciones, ninguna entraría

- No sé por qué se llama Juana de arco si ni siquiera usa arco, usa una lanza- Dijo Mehmed confundido

- Es un apellido tarado, aquí no es como en Estambul donde el apellido te lo ganas- Le dije rodando los ojos

- Ya bueno, pero igual confunde

Me reí de mi hermano, dioses del olimpo, a veces es un idiota, aunque se nota la sangre de Atenea en sus venas, es un excelente estratega cuando deja de bromear. Entre a mi carpa con Mera y me acosté en la cama, mi trasero agradeció el cambio de mi caballo macizo a una blanca y cálida cama hecha de mantas de piel y seda ¿Por qué tantas cosas de piel si vivimos al lado del desierto? Más que nada porque hay muchos osos y animales salvajes en el norte, cerca de Edirne y son un peligro para nuestros pueblos agrícolas, así que los espantamos y cuando no podemos, pues recibo una manta de piel nueva

Mera dejó a Nasra sobre mi pecho, a lo que sonreí con los ojos cerrados al sentir el corazón de mi princesa latiendo a un ritmo lento además de sentir su tierna respiración. Mera comienza a cambiarse el vestido de color celeste que se puso esta mañana cuando descansamos para ponerse el de color rojo que se puso cuando llegamos, se ve hermosa, y aun tiene marcas de mis chupetones en todo su torso, le había hecho bastantes en el barco y me encanta mirárselos, es como el recordatorio de cada vez que estuvo debajo mío gimiendo mi nombre y pidiéndome más

- ¿Por qué crees que una mujer sea escogida General?- Me pregunto Mera volteandose y dejándome ver sus pechos, al ver que estaba mirándola tan fijamente se sonrojo, hay mi amor, tengo todo el derecho del mundo a mirarte y lo aprovecharé cada segundo

- Pues según un informe nos dijeron que era una santa- Mera alzó una ceja sorprendida- No sé si sea verdad, pero lo que es cierto es que mejoro mucho el ánimo de las tropas además de que es buena estratega si lo que decían las cartas de Mehmed son ciertas

- Entonces espero que sea una gran mujer- Dijo Mera sonriendo y sentándose a mi lado, dándome un beso- Entre más rápido pase el tiempo, más rápido podremos estar en el barco de camino a casa

- ¿Pensé que te gustaba Francia?

- Si, el tema de las orgías quitaron mi gusto- Me reí ligeramente viendo su tierno ceño fruncido

- No dejaré que ningún hombre se atreva a tocarte mi amor- Murmuré besándola de nuevo, mucho más lento- Además, no me llaman la atención las mujeres con más maquillaje en la cara que parecen fantasmas- Su risa es como miel para mis oídos, no quiero que piense que la engañare, antes muerta que estar con alguna mujer acá, las posibilidades de contraer una ETS son enormes y si yo me contagio, contagio a Mera y ese tipo de enfermedades son peores para las mujeres

La única mujer con quien deseo hacer el amor aquí en Francia es Mera, ninguna otra

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