Eda
Bajo a la cafetería del hotel para tomarme algo mientras espero a que Alma y Máximo hablen lo que tengan que hablar.
¿Qué historia tendrán estos dos? ¿En qué momento se han conocido? Sus vidas son totalmente distintas. Él, un importante hombre de negocios. Ella, enfermera en el hospital Metropolitano. Ni por asomo han podido encontrarse en algun sitio al que suelan ir los dos.
A las siete voy hacia la reunión que teníamos programada. Me sorprende encontrar la sala completamente vacía. Hay un cartel pegado en uno de los cristales. Me acerco hasta el y leo lo que pone.
Máximo no la cancelaría si no fuera por un motivo importante. No hay nada más importante que los negocios para este hombre. Al girarme choco contra Alaric, al parecer somos los dos únicos pardillos que no nos habíamos enterado.
- La han cancelado - Digo señalando el cartel.
Se extraña al instante, igual que yo.
- Que raro ¿por qué la habrá cancelado?
Hago memoria y recuerdo como hace un par de horas entraba en mi habitación. Camino directa para comprobar si sigue alli. Tal vez esté pensando tonterías y se le haya complicado a su padre el esguince o cualquier otra cosa.
Alaric me sigue sin comprender lo que ocurre ¿cómo va a comprenderlo? Él no ha sido testigo de las miraditas de esos dos ni de lo protector que es Máximo cuando Alma esta cerca.
Coloco los nudillos sobre la puerta y golpeo despacio. Se escucha movimiento dentro.
Máximo abre la puerta con seguridad y decisión. Parece que es su habitación en lugar de la mía.
- Ha cancelado la reunión - Suelto sin pensar demasiado que no es muy inteligente pedir explicaciones.
- Esto era más importante.
Alaric está flipando por encontrarlo en mi cuarto. Todos nos quedamos en un silencio bastante incómodo, porque aunque agradezco que mi amiga sea su prioridad ahora mismo, también me parece raro y por encima de eso, me resulta incómodo no poder entrar a coger mi pijama o una muda limpia.
- Entiendo...
Alaric da un paso hacia mi.
- Puedes dormir en mi habitación, así ellos pueden solucionar sus problemas.
Máximo agradece que les demos intimidad, aunque para ser justos, él tiene una suite un par de plantas encima, podrían irse a ella y dejarme a mi descansar, aunque compartir habitación con Alaric es algo bastante insinuante... Todo hay que decirlo.
Mi amiga se acerca hasta la puerta. El hombre de su lado la mira con ternura y ella parece más animada que hace unas horas.
- ¿Estás bien? - Pregunto bajando el tono con la esperanza de que sólo ella me escuche.
- Si, estoy bien.
Vuelvo a insistir.
- ¿Quieres quedarte con él?
Máximo resopla como si mi pregunta sobrara, pues lo siento, no sobra.
- Si no te importa... Se que es tu habitación y que...
La corto antes de que se autoflagele más.
- No me importa, voy a dormir con Alaric. Mañana nos vemos ¿vale?
Asiente con una radiante sonrisa en su cara.copy right hot novel pub