Massimo se ocupó de todos los arreglos para la boda por lo que no he tenido que preocuparme de nada, aunque será solo una pequeña celebración sin ningún invitado más que los empleados de la mansión quiere que todo sea perfecto, al principio pensé que estaba escondiendo nuestra boda de alguien en especial, pero cuando lo enfrente sobre esto me comento que prefería que fuese así dado que el asesinato de Katherina aún no se ha esclarecido no quería exponerme y que sea el blanco de alguien que esté detrás de él.

Deseaba comprar algo sencillo dado que solo será unión por el civil, pero Massimo insistió en que quería que usará algo más llamativo y no tan simple por lo que opte por un vestido blanco el cual consiste en un corsé de encaje con unas diminutas mangas, unida a él una falda larga y suelta hecha con varias capas de organza la cual tiene una abertura en la pierna derecha a mitad de muslo, es un vestido muy lindo, pero aun así me hace sentir un poco rara.

Estoy en compañía de la señora Marion, Mia y Anely quienes me están ayudando a arreglarme dado que son muy buenas en esto, cuando terminan de arreglarme me miro al espejo y quedo impresionada por su gran trabajo.

-Se ve muy hermosa señora, el señor quedará impresionado -Comenta Marion, yo le aprieto la mano en señal de agradecimiento.

-Muchas gracias, pero todo esto es obra suya -Les dedico una sonrisa, tomo mi ramo de flores y salgo de mi habitación.

Massimo

Estoy un poco nervioso por mi boda con Lilibeth si bien ya antes he estado casado esta vez lo siento diferente, es como si toda mi vida hubiese estado esperando por esta mujer, en cuanto la veo bajar por las escaleras con un pequeño ramo de flores blancas en su delicada mano no puedo evitar lanzar un suspiro, hoy luce extremadamente hermosa, lleva su cabellera larga y castaña recogida en un lindo moño y cuando veo esos lindos ojos color almendra puedo ver un brillo especial en ellos.

En cuanto llega a mi lado que estoy cargando a Alexandre este le ofrece los brazos para que ella lo cargue, estoy a punto de negarme ya que puede ensuciar su hermoso vestido, pero antes de decir algo ella lo toma en brazos, comienza a besarlo con tanto amor y cariño que me hace ver que será una buena madre para él y Katherina estaría tranquila si viera que a nuestro hijo nunca le faltará el amor y cariño de una madre.

El juez comienza con los protocolos para llevar a cabo nuestro matrimonio y Lilibeth en ningún momento ha dejado de cargar a Alexandre mientras su otra mano la tiene entrelazada con la mía. Después de firmar nuestras actas y ahora si convertirnos en marido y mujer beso a mi esposa sabiendo que nadie nunca podrá arrebatármela y que ahora por fin nos pertenecemos el uno al otro.

-Bien ahora comencemos con los otros trámites señor Carluccio -Comenta el juez a lo que Lilibeth me mira extrañada.

-Quiero que seas legalmente la madre de Alexandre -Me acerco a su oído y se lo digo mientras observo la expresión de su cara la cual refleja sorpresa por lo que acabo de decirle.

- ¿Pero su familia no tendrá algún problema con eso? -Pregunta un poco temerosa.

-Ella no tenía familia era hija única y sus padres murieron antes de que nos conociéramos -Veo una expresión de tristeza en cuanto escucha esto, toma más fuerte mi mano y asiente.

-Bien hagámoslo, nunca me arrepentiré de ello -Me sonríe y después se gira para besar a mi hijo en la cabeza. Después de firmar todos los papeles necesarios el juez da por terminado el proceso y se retira.

-Ahora si oficialmente eres la madre de mi hijo -Asiente y se acerca lentamente a mi para darme un casto beso - ¡Ah, no! No me conformo con eso -La sujeto por la cintura y la pego a mí para fundirnos en un beso tan cargado de pasión que por un momento olvidamos donde estamos y solo logramos separarnos debido a que estamos apachurrando a Alexandre -Ahora si es nuestro hijo, preciosa -Digo mientras me alejo de ella y escuchamos las felicitaciones de mis empleados.

Lilibeth

Después de nuestra boda hemos planeado irnos de luna de miel por unos días a La Costa Amalfitana donde no me sorprende para nada enterarme que Massimo posee una propiedad en dicho lugar, solo que tendremos que esperar una semana en lo que Massimo arregla unos asuntos antes de nuestra partida. Antes de viajar hemos decidido hacer unas compras por lo que solo salimos él y yo dejando a Alex al cuidado de Mia como estaba dormido no quisimos despertarlo.

Pasamos una agradable tarde y a la hora de la comida decidimos comer en un hermoso restaurante llamado Scalinata Borghese es un lugar muy lindo y agradable, después de terminar nuestra comida salimos rumbo a nuestro auto, pero antes de llegar a este Massimo recibe una llamada por lo que se disculpa y se aleja un poco de mí, estoy observando la plaza cuando escucho una voz familiar llamarme.

-Señorita Lilibeth, que agradable sorpresa -Me saluda Renzo con una enorme sonrisa.copy right hot novel pub